¡Seguimos trabajando por el bienestar de nuestras niñas, niños y adolescentes!

Desde la Municipalidad, reafirmamos nuestro compromiso inquebrantable con la niñez, llevando alegría, color y esperanza a quienes más lo necesitan. Esta semana, con profunda emoción y entrega, el Departamento de Obras Públicas, en conjunto con los talentosos técnicos de la Unidad de Arte y Diseño, emprendió una hermosa labor de transformación en la Casa de Acogida “Mi Hogar”.

A través del arte, la dedicación y una visión ambientalmente responsable, se están renovando los espacios de este importante centro de protección, que brinda acogida a niños, niñas y adolescentes que se encuentran bajo la modalidad de acogimiento institucional. Estos trabajos no solo mejoran el entorno físico del lugar, sino que también nutren el alma de quienes lo habitan.

 Pintura con propósito y respeto por el planeta

En línea con nuestros principios de sostenibilidad, cada mural, cada pared y cada rincón intervenido está siendo pintado con pintura ecológica, libre de agentes tóxicos y no contaminante, asegurando un ambiente saludable tanto para las y los residentes como para el medio ambiente. Esta elección reafirma nuestro compromiso con el cuidado del entorno y la construcción de una comunidad más consciente y responsable.

 Espacios llenos de vida, luz y sonrisas

El resultado es un verdadero festival de color y ternura. Las paredes ahora reflejan sueños, emociones y un mundo imaginario construido desde el corazón de las niñas y niños de la casa. Muchos de los dibujos y diseños fueron inspirados en sus propios deseos, recogidos a través de actividades participativas previas. Animales, paisajes, estrellas, flores y personajes fantásticos ahora adornan los muros, convirtiendo la casa en un verdadero refugio de alegría y esperanza.

Uno de los artistas participantes expresó conmovido:

“Aquí no solo pintamos paredes, pintamos alegría. Cada trazo es una historia, cada color una ilusión.”

 Un hogar que protege, acoge y transforma vidas

La Casa de Acogida “Mi Hogar” cumple una labor esencial en la protección de los derechos de la infancia. Su propósito es brindar un entorno seguro y afectivo a niños y niñas que, por distintas razones, no pueden estar momentáneamente con sus familias. A través de una atención integral, el objetivo es que puedan, cuando se den las condiciones necesarias, regresar a sus hogares con sus derechos plenamente protegidos.

Porque cuando trabajamos con el corazón, el cambio se nota. Y en cada pincelada de esta intervención, se respira un mensaje claro: ¡nuestros niños y niñas merecen crecer rodeados de belleza, cuidado y esperanza!

 

JEV